Invertir en Uruguay

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Economía y oportunidades

Existe comunicación terrestre, aérea y marítima con todos los países de la región y cobertura universal de telefonía fija, celular y de internet, que asegura conectividad y negocios con cualquier sitio del mundo y a cualquier hora.

Existe comunicación terrestre, aérea y marítima con todos los países de la región y cobertura universal de telefonía fija, celular y de internet, que asegura conectividad y negocios con cualquier sitio del mundo y a cualquier hora.

 

Hay libertad de movimientos de personas, ventajas promovidas de inversión y beneficios fiscales especiales para la radicación de inversores extranjeros.

 

En tal sentido, el sector inmobiliario es un lugar de refugio, con interesantes y variados retornos.

 

Además de la oferta tradicional para el desarrollo de proyectos inmobiliarios, existe legislación que promueve grandes proyectos y emprendimientos de mediano porte mediante el amparo de la vivienda promovida.

 

Hay además una inmensa cartera de tierras de muy buena calidad y excelentes precios.

 

Es una nación con paz social, estabilidad institucional y económica, hay respeto por la propiedad y cumplimiento por los compromisos jurídicos de los que el país ha hecho tradición centenaria.

 

Las oportunidades y el reaseguro son una condición ancestral de esta actividad en el país, que no ha variado ni con momentos difíciles ni cambios de gobierno, haciendo de ello una de las políticas de Estado inviolables desde hace casi dos siglos.

Este país cuenta con un crecimiento económico constante, una fuerte expansión del sector inmobiliario e incremento del mercado de alquileres para vivienda.

 

Uruguay el mejor socio para desarrollar negocios, porque es la puerta de entrada a América Latina.

 

Es una economía sin límites para la dotación de capital extranjero en las empresas, existe igualdad de trato para firmas extranjeros y locales, el sistema impositivo es único en todo el territorio y hay un archipiélago de territorios francos para convertir al país en un excelente “hub” logístico.

 

No se exige contraparte local, ni autorización o registro previo para las empresas, no hay restricciones en la repatriación de utilidades y el mercado de cambios goza de absoluta libertad.

 

La inversión en el área de bienes raíces se hace muy atractiva para desarrolladores inmobiliarios a gran escala, así como para particulares deseosos de invertir en un entorno emergente, estable y con un gran futuro en su rentabilidad.